No sé cómo nace el pan
pero amo el trigo
que tú eres
No sé cuál es tu aroma
pero amo el color
donde floreces
No sé si eres
de pétalos o harina o pluma
No sé si tienes
miedo o sólo sigues
enamorada
No sé lo que sucede
cuando estás ausente
No sé de dónde el sentimiento
o el impacto o la caricia
Apenas puedo ofrecer mis ojos
o mis recuerdos para encontrar
la palabra que te salve
Para ocultar la sutil y esencial diferencia
entre un demonio y un ángel